Iniciar casi siempre con un prólogo, una cita, un saludo o un beso… qué mas da, lo difcil es iniciar, continuar y por último desprenderse. No quisiera que en ésta ocasión mi imaginación fallara como tantas veces, pero intentémos hacer un breve recorrido literario a través de las ideas que perforan mi cabeza como cuervos hambrientos y sedientos de palabras que por alguna extraña razón se negaban a salir.

Los cuervos de mi mente viven sin reservas, acurruca

dos en el árbol mas sombrío de mis pensamientos, ahí anidan, adquieren su majestuoso color negro y esperan el momento preciso para volar y revolotear en mi cabeza como truenos del cielo que me ocasionan jaqueca, pero sé que aun en la molestia cada uno de ellos vuela deseando salir para liberarme de su ruido, buscando la salida por mis ojos en lo que parecieran gotas saladas, transparentes, lo que mucha gente llama lágrimas, o pedazos de tiempo en un teclado que escribe, escribe, escribe…

Heme aquí tratando de sacarlos nuevamente y poco a poco, heme aqui inventando historias, contando comedias, tragedias, sentimientos, pensamientos, héme aquí exorcizando mis demonios y creando un ambiente ecléctico, la liberación ha comenzado.

Bienvenido seas, de nuevo a este pequeño mundo olvidado, ¿me ayudas introduciendo tu cabeza y diciendome si los cuervos aun vuelan?